Según Coffee Finance Network (www.coffinance.com), el café y el té son bebidas populares a través de las cuales los consumidores pueden obtener cafeína para regular la energía y, al mismo tiempo, experimentar varios sabores. Como los productos listos para beber (RTD) mantienen el ritmo de la cultura de alimentos y bebidas, con un énfasis creciente en la inmediatez, conveniencia, exploración y salud, los productos RTD se consideran culturalmente relevantes y al mismo tiempo alternativos. Una alternativa a las bebidas carbonatadas tradicionales.
Según los cálculos de agencias de consultoría extranjeras, el tamaño global de café listos para beber y té instantáneo en 2016 fue de aproximadamente US $ 71.3 mil millones. El tamaño del mercado alcanzará los US $ 164.2 mil millones para fines de 2026, con una tasa de crecimiento anual compuesta de 8.7% durante el período.
Tamaño global del mercado de té y café listos para beber desde 2016 hasta 2026
En 2016, el té listo para beber representó 2/3 de las bebidas listas para beber. Sin embargo, a medida que la demanda del consumidor continúa creciendo, la proporción del café instantáneo listo para beber continúa aumentando, y ambos representan casi la mitad. En términos de mercado, la región de Asia-Pacífico es la región con la mayor tasa de crecimiento para el café y el té listos para beber, seguido del mercado norteamericano. Se espera que los países asiáticos, especialmente India y China, impulsen este mercado rápidamente en los próximos años. Se espera que la demanda del mercado de té y café listos para beber en América del Norte sea testigo de un crecimiento significativo en los próximos años debido al aumento de la conciencia de la salud y los efectos adversos de las bebidas carbonatadas. Además de esto, el aumento de la urbanización e industrialización, los estilos de vida ocupados, el aumento del ingreso per cápita disponible y el aumento de la conciencia de la salud son las principales fuerzas impulsoras para el mercado global de té y café listos para beber durante el período de pronóstico.
